BLOG PERSONAL DE MANUEL BARRERO: islam

domingo, 18 de septiembre de 2022

El caso de Mahsa Amini y la reflexión necesaria sobre costumbres inapropiadas en estos tiempos.

Mujeres ataviadas con prendas tradicionales islámicas

Recientemente los diferentes medios de noticias internacionales, se inundaron con la información del trágico suceso en Irán en donde ocurrió la muerte de la joven Mahsa Amini, una mujer que simplemente quiso llevar el velo que impone el Islam de una forma que no le gustó a la guardia islámica de la moral en dicho país.

Mahsa Amini

Es algo impensable que en pleno siglo XXI, después de una larga evolución de la humanidad, existan costumbres dantescas como esta, motivadas a la interpretación a conveniencia de preceptos religiosos y en sociedades sometidas donde no existe la igualdad, libertad ni el libre pensamiento.

Tipos de velos islámicos

Luego viene el hecho de que estas cosas no solo se observan en Irán, yo vivo en la ciudad de Valencia, en Venezuela, donde no hace más de tres días observe cruzar una calle frente a mí, una mujer vestida con un Niqab, atuendo de color negro que la cubría por completo y solo permitía dejar libres sus ojos, quizás para que pudiera caminar sin tropezarse. También recuerdo una de mis visitas a FARMATODO, una muy conocida franquicia de medicamentos y tienda de víveres, lugar donde me conseguí una mujer vestida con una Burka.

Es incongruente que en un país como el nuestro, que la constitución establece la igualdad de género, igualdad de oportunidades y respeto pleno a los derechos humanos, existan personas viviendo bajo ese sometimiento, sea por cuestiones religiosas, sociales, familiares o culturales, es inaceptable.

Mujer vestida con Niqab

Como hijo de migrantes españoles, doy fe que mis padres, lejos de empeñarse en mantener las costumbres de la sociedad española, se adaptaron y defendieron la libertad que disfrutamos en Venezuela, tierra de gracia que ha recibido a personas de todo el planeta.

No es descabellado pensar que esas mujeres vestidas con Burka o Niqab, deben tener prohibido trabajar, estudiar, conducir un vehículo o salir solas a la calle, luego en ambos casos que las observé, estaban con una acompañante femenina. También es posible que el hombre de esa casa, luego de someter de tal forma a su mujer, también tenga dos o tres mujeres más a la usanza de ciertos países islámicos, asunto que constituye delito en Venezuela y se llama ADULTERIO, ya que nuestro código civil no permite segundas ni terceras nupcias en respeto por la familia y de los niños que allí se forman.

Tal como lo hizo Francia y prohibieron el uso de la Burka, en el resto de los países occidentales deberíamos hacer lo mismo, no es lógico que los migrantes vengan a cambiar nuestra cultura, costumbre y leyes. Existe la libertad religiosa, es cierto, sin menoscabo o detrimento del cumplimientos de las leyes en el país.

Escribiendo estas líneas recuerdo otra noticia de la semana, el primer vuelo tripulado 100% por mujeres en Venezuela, ¡qué bonito!, no perdamos estas cosas hermosas por una mal entendida tolerancia, no se puede ser tolerante con quienes limitan y pretenden despojar de derechos a las mujeres.

Tripulación aérea venezolana 100% femenina

Por medio de este artículo hago un llamado a la cordura, pido no acabar con cientos de años de luchas por los derechos civiles y que las mujeres en cualquier país donde vivan sean tratadas como seres humanos, con igualdad de derechos y oportunidades.