viernes, 17 de enero de 2025

Reflexiones y comentarios sobre lo que es vivir en Venezuela.

Cronos

Saludos a todos quienes me siguen o leen en mi blog desde distintas partes del planeta. Esta semana se me hace difícil escribir, digamos que, siendo humanos, por más duros que intentemos ser, siempre existen situaciones que nos tocan y afectan. Esta semana mi hija de veintidós años despidió a uno de sus mejores amigos y yo, casi al día siguiente despedí a uno de los míos, ambos partieron de esta vida por diferentes causas, para ella es la primera vez que se topa con tal cruda realidad y para mí no es la primera, seguramente no será la última y lo estoy viviendo a mis casi sesenta años. Lo cierto es que afecta de la misma forma, seas joven, adulto, hayas pasado por eso una sola vez o muchas, la muerte es algo que negamos y rechazamos, sin embargo, es una parte de la vida, tal como el mismo acto de nacer, digamos que son los dos únicos hitos que con toda seguridad se presentan.

No pude evitar recordar la trama en una de mis novelas “El último expreso”, un viaje en ferrocarril donde los personajes se encuentran, se conocen y algunos continúan viéndose después del trayecto. La vida es como un viaje en tren, nos subimos con un destino y en un vagón, allí hay determinadas personas que nos acompañan temporalmente, algunos por todo el recorrido y otros por una parte del trayecto, el tren se va deteniendo en diferentes estaciones, en ellas hay quienes suben y otros bajan, claro, no da tiempo a crear vínculos ni generar nostalgia, en la vida el trayecto es mucho más largo y esto hace que se generen lazos afectivos. A pesar de que todos estamos conscientes de la temporalidad en este viaje, no podemos evitar sentir nostalgia por los que se van.

Pensé decir muchas cosas en este artículo, les confieso que escribiéndolo, borré dos veces lo que había redactado, vivo en un país que no se parece en nada al lugar donde nací, crecí y desarrollé mi vida, es difícil no dejarse llevar por la impotencia que se siente ante lo que ocurre, varios de mis amigos, conocidos, antiguos compañeros de trabajo y vecinos han sido derrotados, vencidos por un país que se esta comiendo a su propia gente, tal como Cronos se comió a sus hijos. Me pongo a pensar de qué sirven la política, el idealismo y tantas cosas que hoy me parecen absurdas, hay que convertir en cenizas una nación por defender una idea, una cuota de poder, dinero o negocios. Yo me pregunto: ¿Alguien se ha llevado para el más allá su dinero, el carro, la casa, los relojes o cualquier otra cosa?

En Venezuela vivimos dentro de un estanque de tiburones, nos estamos comiendo entre nosotros, hay quienes salen a las calles todos los días a ver de donde sacan dinero, sea de la forma que sea, sufriendo quienes tratan de sobrevivir de manera honesta y sin afectar a los demás. Esa es la terrible realidad, de allí parten la migración de millones de venezolanos, la quiebra de muchas empresas, negocios y la gran frustración existente. Hago todos estos comentarios debido a que el peor de todos los enemigos crece con esta crisis y cada día cobra más víctimas: la depresión. ¿Cuántas personas sufren de depresión en Venezuela?, ¿Cuáles son sus causas?, ¿Quién se ha tomado un tiempo para realizar dicho estudio?, ¿Se hace algo por solucionar el problema?: parecen preguntas lanzadas al vacío. En la ciudad de Mérida tuvieron que poner policías de guardia en el viaducto para evitar que la gente se lance al vacío, para las autoridades fue más sencillo eso que atacar los orígenes del problema.

Ya para finalizar, ruego a Dios por un cambio en las condiciones que se vive en Venezuela, como decía un antiguo jefe mío, “buenas intenciones no preñan”, no es suficiente con hacer actos mensuales prometiendo miles de cosas que no se cumplen y nunca se materializan, las palabras no logran nada, se requiere acción para lograr cambios tangibles, en muchas instituciones hay afiches con una frase de Albert Einstein que reza algo así como: “No podemos lograr resultados distintos haciendo siempre las mismas cosas”. Si no cambiamos, llegará el día en que el último tiburón del estanque se muera de hambre por haberse comido al resto o sencillamente, se mudará para otro estanque. Los políticos nunca irán a trabajar en el campo, ni a las fábricas ni van a producir nada, el día que el país de su último suspiro, se mudarán a otros, tal como ya algunos lo vienen haciendo.

Si me lees desde Venezuela y en algún momento sientes que la tristeza se apodera de ti, díselo a tus seres queridos, amigos y familiares, si ellos no le dan importancia o el apoyo que te brindan no te ayuda a salir de la situación, busca ayuda profesional, hay varias líneas activas de psicólogos que están dispuestos a atenderte, búscalos en las redes sociales o la web, no te quedes encerrado con el problema.

Para evitar la depresión, puedes:

Practicar ejercicio regularmente

Tener una dieta saludable

Evitar el consumo de alcohol y drogas

Practicar técnicas de relajación

Mejorar tus relaciones interpersonales

Identificar y manejar tus emociones

Pensar y actuar de manera positiva

Dormir lo suficiente

Establecer rutinas y objetivos

También puedes:

Hacer cosas que te gusten

Pasar tiempo en la naturaleza

Cultivar tu sentido del humor

Practicar actividades que te hagan sentir bien

Comunicarte con tus emociones

Buscar apoyo en familiares y amigos

Gracias por visitar y leer mi blog, espero que el presente artículo haya sido de tu agrado y de ser así que lo compartas entre tus allegados. 

Te invito a seguir mi blog, subscríbete a él y así podrás recibir un aviso cada vez que publique un nuevo artículo.



 

Nuevos canales de distribución


Manuel Barrero online:

Página web: https://sites.google.com/view/manuelbarrero/home

Acerca de mi: https://about.me/manuelbarrero

Red de Escritores Hispanoamericanos: https://www.escritores.org/libros/index.php/item/manuel-barrero-sierra/ 

 

Asesorias


 


sábado, 4 de enero de 2025

Primer post del año 2025

Saludos a todos los que me leen y especialmente a mis asiduos visitantes en este blog. Les escribo con la alegría y la esperanza que dan un nuevo año, deseando para todos ustedes un feliz 2025, con mucha salud, felicidad y bienestar. Siempre hay quienes dicen que todo sigue igual, claro, si pensamos de esa forma, es lógico que todo siga igual, lo importante es la actitud y aptitud que tengamos ante el día a día, como decían los antiguos romanos, “CARPE DIEM”.

Si han tenido la oportunidad de ver los videos sobre “El poder de tu mente” en mi canal de YouTube, saben a que me refiero, nuestros pensamientos terminan dando forma a nuestra realidad, somos nosotros quienes producimos esa “película” que pasa frente a nosotros. Como leí en días pasados, todos tenemos por dentro un ángel y un demonio, depende de nosotros a quien dejamos salir y gobernar nuestra vida, es como aquella célebre novela “El extraño caso del Dr. Jekill y Mr. Hyde”, del escritor británico Robert Luis Stevenson, en ella se plasma la historia “ficticia” de un médico que realiza experimentos sobre su propio cuerpo y descubre que aflora de él una repudiable personalidad cada vez que ingiere cierta sustancia. Hay quienes creen que se inspiró en el célebre padre del psicoanálisis Sigmund Freud.

¿Cuál parte de ti gobernará tu vida este año 2025?

Esa es una pregunta que les invito a realizarse, en lo personal, desde hace algunos años, he ido sustituyendo algunos de los tradicionales doce deseos de las uvas del tiempo por propósitos personales de superación espiritual. No debemos esperar que el mundo cambie para nosotros o las personas a nuestro alrededor cambien, no podemos asumir tareas imposibles de factores o variables que no dependen de nuestra voluntad, así que la mejor forma de cambiar nuestras vidas es realizando un cambio interno, algo que nos mueva a ver la vida diferente y reaccionar de manera distinta a nuestro entorno. Recuerdo que el año pasado me propuse desarrollar la tolerancia, asunto difícil y que aún trabajo, este año me voy a proponer perdonar, no a terceros, no soy quien, esas son cosas de Dios, en este caso me voy a perdonar yo, por cosas que pienso no debí hacer y de esa manera cerrar los ciclos en mi pasado, los karmas como dicen los budistas. Después de todo no vale la pena atormentarse por un pasado que no existe ni cargarse de ansiedad por un futuro imaginario, tenemos que vivir y disfrutar el presente, el AHORA.

Ya en otra onda, este año debo publicar la segunda parte de “Infinito” y quizás comenzaré otro libro, aún no defino de varios temas que tengo en mente, cual será el afortunado en salir al mundo.

Para finalizar, nuevamente les deseo un feliz 2025 y mis mejores deseos de que la humanidad logre conseguir su verdadero sentido de existencia, en el único planeta que tenemos y en una vida tan fugaz que no vale la pena desperdiciarla con odios ni rencores. Seamos felices todos.

Gracias por visitar y leer mi blog, espero que el presente artículo haya sido de tu agrado y de ser así que lo compartas entre tus allegados. 

Te invito a seguir mi blog, subscríbete a él y así podrás recibir un aviso cada vez que publique un nuevo artículo.



 

Nuevos canales de distribución


Manuel Barrero online:

Página web: https://sites.google.com/view/manuelbarrero/home

Acerca de mi: https://about.me/manuelbarrero

Red de Escritores Hispanoamericanos: https://www.escritores.org/libros/index.php/item/manuel-barrero-sierra/ 

 

Asesorias


Entrada destacada

Las Delicias de la Comida Criolla

Publicaciones populares